martes, 21 de junio de 2011

Templo de Compras


















El mundo moderno no sólo ha sabido seducirnos con sus infinitas posibilidades tecnológicas y sus inventos prácticos, también ha impuesto su principal modo de adquirir objetos de deseo: el shopping.
Pero ir de compras, o de shopping, ya no sólo es aplicable a cosas materiales, ahora también se hace shopping espiritual. Así, no es raro que uno se acerque a la góndola de las terapias para elegir entre el clásico análisis de diván o el auge de las terapias llamadas "breves". Entre éstas últimas puede llevarse un paquete de sesiones grupales ( con o sin percusión, de rituales primitivos, bajo las estrellas o las constelaciones, intensivo de fin de semana o semanal, de ritmos africanos o de danzas tántricas, neurocelulares o biofísicoecológicas, multisensorial o psicodinámicas, con o sin cristales, hipnóticas o mántricas, diurnas o nocturna...) o decidirse por un pack de sesiones individuales, con o sin regresión a una vida pasada, de sentado o de parado, con o sin luz azul, en trance o en tránsito.
Luego uno puede acercarse a la góndola de objetos de culto y elegir entre la infinidad de sahumerios de la india, las piedras de colores, las velas aromáticas con esencias de frutas y verduras, las moneditas con o sin agujeros, los colgantes para ahuyentar malos espíritus, ideas de poca monta, espíritus molestos o chantajes emocionales a distancia.
También puede adquirir mantas voladoras a otras dimensiones, mats que alteran la percepción extra sensorial, cintas revitalizadoras, almohadillas que aumentan el coeficiente intelectual, mascarillas que promueven la iluminación y zapatillas especiales que favorecen el ascenso a otros planos.
En el sector bebidas hay para tirar al techo, pero no, no hay techo, ¡el cielo es el límite!
Allí uno puede optar entre las aguas libres de toxinas y mala vibra, bebidas energizantes que optimizan el bioritmo, tés que auspician la meditación y las visiones del más allá, o adquirir envases para llenar con aguas benditas de distintas regiones del mundo.
En el sector libros uno puede pasarse la mitad de la vida mientras se instala la duda entre seguir las enseñanzas del gurú indio, el pai francés o los emergentes locales.
Cuando uno llega a la caja, podrá hacer una selección final antes de llevarse los paquetes a casa. Allí será mucho más difícil aplicar el criterio de selección, además de que la inversión habrá salido un poco menos cara. Si no se logra esa depuración final se corre el riesgo de sufrir una intoxicación espiritual severa. Y lo que menos debería provocar el shopping espiritual es sintomatología física y típicamente terrenal.
Es verdad, todo esto podría evitarse haciendo la compra on line, pero sin el debido esfuerzo y sacrificio de peregrinar hasta el templo de compras no sería lo suficientemente espiritual.

Victoria Branca

11 comentarios:

  1. Te acabo de "encontrar" Victoria...sos brillante!!! Me fascina lo q escribís y sobre todo, las reflexiones q transmitís...
    Excelente post!!! Muy muy real...
    Besos enormes y te seguiré leyendo!!
    Celeste

    ResponderEliminar
  2. Te tengo que mandar una foto de la iglesia con 'drive through prayer' que queda cerca de casa. Te moris.

    ResponderEliminar
  3. yo quiero la manta voladora pero con luz azul...se puede?????
    ♥ besos!!!!!

    ResponderEliminar
  4. Quiero ver esa foto del drive through prayer... ¿Viene con big mac?

    ResponderEliminar
  5. Buenisimo ma!!! Quiero la almohadilla que aumente el coeficiente intelectual!

    ResponderEliminar
  6. aaah pero cuánto hemos avanzado desde el shampoo que contiene aumenting volume! jajaa

    ResponderEliminar
  7. El sincretismo en que ha caído el hombre de hoy, es el resultado de ese mercado espiritual, en el que se ofrece y se busca solución a todo.
    El hombre ha huído de sí mismo, y de la idea de Dios...Y ante cada dificultad busca calmarse en "objetos esperituales", en filosofias que no le demanden compromiso, ni le señalen culpas...
    Y cae en mercados donde todo se vende, se compra, se ofrece...Pero nada sacia su sed de Eternidad, de transcendencia.
    "Nos hiciste Señor para tí, y nuestro corazon no descansará hasta no estar en tí"

    ResponderEliminar
  8. como me gustan las velas aromaticas con aromas a frutas!!!! buenisimo tu post!! beso tinker bell

    ResponderEliminar
  9. me hiciste acordar a algo que leí estos días, Gabrielle Roth...¨el crecimiento, un viaje... y hay muchas maneras de ir.., se puede ir en auto, en bondi, en avión, por una ruta, por otra...¨
    Reconozco que algunas me gustan más que otras, que las que prometen magia sin trabajo personal no me atren mucho, pero también confieso, que me llevé lindas sorpresas animándome a ver qué onda otras rutas, otras herramientas...
    Saludos
    Flor

    ResponderEliminar